La cirrosis es un trastorno del hígado que interrumpe la capacidad para realizar funciones vitales. Es más común en personas mayores de 40 años.
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Es un trastorno grave del hígado que puede llevar a insuficiencia hepática. Esta enfermedad ocurre cuando el hígado está dañado y se intenta cicatrizar el tejido hepático. Esto puede interrumpir la capacidad para realizar funciones vitales, como la filtración de toxinas del cuerpo, la producción de proteínas y la regulación de la cantidad de líquido en el cuerpo.
No existe una edad específica para ser diagnosticado con cirrosis, sin embargo, es más común en personas mayores de 40 años.
Causas y síntomas
Existen diferentes causas como:
- El consumo excesivo de alcohol.
- Enfermedades hepáticas crónicas.
- La colangitis.
- Enfermedades hereditarias.
- Insuficiencia cardíaca.
- Exposición a toxinas.
Por otra parte, los síntomas más comunes son:
- Hinchazón de tus piernas y pies.
- Dolor e hinchazón abdominal.
- Aumento de la presión arterial en las venas que drenan el hígado.
- Sangrado de las encías o del ano.
- Manchas en las palmas de las manos.
- Esteatosis hepática no alcohólica, es decir, grasa en el hígado.
- Ascitis.
Todas estas complicaciones pueden provocar cáncer de hígado.
Prevención y tratamientos de la cirrosis
La mejor forma de prevenir la cirrosis es evitar las enfermedades que pueden causarla. El mejor consejo: adopta buenos hábitos de vida como:
- Evita el consumo excesivo de alcohol.
- No fumes
- Aléjate de sustancias tóxicas.
- Lleva un buen control de las enfermedades que pueden agravar la cirrosis. Por ejemplo, cuida tu alimentación para evitar el hígado graso.
Esta enfermedad se trata de diversas maneras, dependiendo de lo avanzado que esté el daño hepático, las causas de la enfermedad y si existen complicaciones.
El tratamiento puede incluir:
- Medicamentos: se usan para tratar las enfermedades que causan cirrosis, como la hepatitis C, y para aliviar los síntomas de la enfermedad.
- Cirugía: se usa para extirpar una parte del hígado dañado para que el hígado sano pueda seguir funcionando.
- Trasplante de hígado: se reemplaza un hígado dañado o enfermo por un hígado sano de un donante.
- Cuidado de enfermería: trata las complicaciones de la cirrosis, como la ascitis, y ayuda a los pacientes a seguir una dieta saludable.
¿Qué médico trata la cirrosis?
Un gastroenterólogo es quien puede tratarte si estás mostrando signos de cirrosis. Agenda tu cita con Doctorisy.
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